¿Qué son las Prótesis de Brazo Robótico?

Una prótesis de brazo robótico se trata de un aparato tecnológico que es empleado para sustituir un miembro superior del cuerpo humano amputado, pero que a diferencia de las prótesis tradicionales, tienen elementos mecánicos/eléctricos, motores, sensores y pueden ser conectadas al sistema nervioso para controlar los movimientos que realizan de forma automatizada, sustituyendo funcionalmente a un brazo humano real.

Se tratan de instrumentos que funcionan de manera autónoma, ya que cuentan con servomotores diseñados para administrar la fuerza, movimiento y equilibrio necesario para que las personas puedan recuperar las habilidades que un brazo normal les da, como sujetar objetos, equilibrarse y más.

Estas prótesis de brazo robótico o biónico pueden realizar los movimientos naturales e incluso otros que los brazos biológicos, por sus limitantes, no pueden realizar, de tal forma que ayuda a los pacientes a recuperar capacidades perdidas por la amputación.

Estas prótesis inteligentes también permiten a las personas escribir, manipular objetos u herramientas y muchas otras funciones que realizamos todos los días con los brazos y las manos y que, las prótesis convencionales no pueden realizar.

Estas prótesis biónicas han sido desarrolladas y mejoradas con el paso de los años y los avances tecnológicos para perfeccionar sus movimientos y que puedan ser un medio para que las personas que han sufrido una amputación recuperen su calidad de vida con la mezcla entre el desarrollo médico y la tecnología.

¿Cómo funciona una Prótesis de Brazo Robótico?

Una prótesis de brazo robótico funciona con los mismos principios mecánicos de las prótesis tradicionales, pero la diferencia es que implementa la más alta tecnología para que la fuerza y los movimientos sean independientes, predictivos y lo más acertados a los deseos del portador.

Esta prótesis biónica viene implementada con una serie de motores, articulaciones, sensores y procesadores computacionales que recogen e interpretan los impulsos nerviosos del cerebro y los traduce en movimientos que permiten a la persona realizar las tareas de su vida diaria.

Estos impulsos nerviosos son corrientes eléctricas y de información que el cerebro manda a las extremidades para coordinar el movimientos motriz del cuerpo y cada parte que puede ser independiente o generar movimientos específicos. Estos a través de la tecnología y medicina han podido ser recogidos e interpretados por estos mecanismos para otorgar inteligencia y mayor control de nuestra prótesis.

Existe una amplia variedad de modelos de prótesis de brazo robótico, ya que con los avances agigantados de la tecnología hoy en día, se logra que cada vez estos aparatos sean más inteligentes, sofisticados y precisos, y de seguir así, seguramente en un futuro cercano podrán ser más exactos y realizar movimientos casi ilimitados.

¿Cómo utilizar una Prótesis de Brazo Robótico?

Antes que nada es indispensable dejar en claro que las prótesis de robóticas de brazo no son instrumentos comunes, ya que su tecnología, costo e implementación tienen precios elevados, además de que no cualquier persona es candidata al uso de estos aparatos.

Los médicos tienen que hacer un riguroso examen físico para determinar si el cuerpo de una persona es apto para la implementación de este tipo de prótesis, así como si el muñón es adecuado para la prótesis biónica sin el riesgo de generar complicaciones.

De igual manera se debe contemplar que esta prótesis también requiere de un arduo proceso de rehabilitación para aprender a usar y coordinar los movimientos de forma segura.

Para esto se debe controlar de forma rigurosa la alimentación del paciente, ejercicios y fisioterapia para fortalecer la parte del cuerpo en donde se pretende adaptar la prótesis, pues de lo contrario es probable que no se cuente con la fuerza y cualidades físicas para controlarla y sacarle el mayor provecho posible.

Todo esto dependerá del tipo de prótesis de brazo biónico que se implemente en el cuerpo, ya que existen tanto prótesis mecánicas como hidráulicas y neumáticas.

¿Cómo se controla la Prótesis de Brazo Biónico?

Para el control de la prótesis de brazo robótico, este se realiza por medio de diferentes tecnologías, ya que algunas tienen sensores predictivos que aprenden de los movimientos y forma de interactuar con su ambiente de las personas, y las cuales se mueven automáticamente dependiendo de los impulsos nerviosos de la persona.

Actualmente se ha trabajado mucho en la tecnología por medio de implantes al sistema nervioso, los cuales detectan los impulsos emitidos por el cerebro para mandar órdenes de movimiento y controlar el desplazamiento y la fuerza de la prótesis.

Inclusive se trabaja en la actualidad en prótesis biónicas que funcionan por medio de controles o inclusive por medio de apps para el celular del paciente, de tal forma que con unos toques puedan controlar el movimiento, fuerza y velocidad.

Muchas de estas prótesis de brazo robótico son aún prototipos, y las existentes son pocas pues su complejidad y altos costos las ponen al alcance de muy pocas personas. Sin embargo, cada vez más médicos e ingenieros unen fuerzas para lograr modelos que en un futuro puedan ser fabricados y distribuidos a gran escala entre las personas que necesitan este aparato a causa de una amputación.

¿Cuánto cuesta una Prótesis de Brazo Robótico?

Al igual que las prótesis tradicionales, estas tienen precios bastante variables que dependen del tipo de amputación, sección del brazo a reemplazar, materiales utilizados, y en este caso, de los tipos de motores, sensores y aditamentos tecnológicos que son de alto valor.

Como estas prótesis no se producen a gran escala o de forma estandarizada, sino personalizada, de esto también depende el precio, sin embargo, hay registros de que muchos llegan a alcanzar precios de más de 200 mil pesos.

Actualmente diversos organismos ofrecen programas de apoyo a personas de escasos recursos y que necesitan de una prótesis para la recuperación de su calidad de vida, para lo cual, se les asignan modelos prototipos con el fin de ayudarlos al mismo tiempo que se estudian los resultados.